euphoria

Hoy tuve otra excursión, esta vez de ética. Vimos una obra sobre la pobreza y un señor nos habló sobre todo eso. Nos puso como ejemplo a chavales de Santiago de Chile. Estos chicos tienen mi edad y viven debajo de un puente -literalmente- en una caja de cartón. Cada mañana se despiertan, doblan su cajita y se van a clase -eso los que pueden, si es que no se han metido en mafias antes-. Había un chico en concreto que tenía 15 años, huérfano, vivía con sus hermanos en una caja de cartón. Iba a la escuela y allí se hizo amigo del profesor -uno de los que estaban allí explicándonoslo-. De repente no se supo más de él. Pasaron unos meses y el profesor recibió una carta. En ella decía que no le buscara, que acababa de firmar su sentencia de muerte. Se había metido en la mafia de la droga. Eso significaba que había decidido vivir hasta los 22 años. Una vida demasiado corta ¿no? Los de la mafia mataban a los chavales a los 22 años porque se consideraba que sabían demasiado. Luego estos eran reemplazados y listo. Todo esto él lo hizo por ayudar a sus hermanos y para asegurarles un futuro. Al salir del teatro -que síiii, que duró 4 horas y que al final a todos nos dolía el culo- tuve que oir de muchos compañeros mios "Aaaaai, que coñazo, para esto me hubiera quedado en casa". Pero payaso, ya veo que no te da ningún cargo de conciencia todo esto. Naah, que va, no va contigo. Yo no sabré mucho de sociales o de matemáticas pero al menos sé lo que es el respeto y pensar en los demás. Cosa que algunos no aprenderán en su puta vida.